Para lograr ser una empresa saludable es importante entender que es lo que esto significa, para cumplir con el compromiso de valorar y preservar el bienestar de todos sus empleados. Es decir el concepto debe enfocarse de manera integral, tanto en términos físicos como emocionales. Es por ello que organizaciones fomentan una cultura que promueve la colaboración y el trabajo en equipo, que se caracteriza por fomentar el entusiasmo y creatividad. Esto quiere decir que no se debe priorizar únicamente las ganancias y los resultados financieros, una empresa saludable debe priorizar el factor humano.
¿Qué es una empresa saludable según la OMS?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define un ambiente de trabajo saludable como aquel en el que los trabajadores y el personal directivo colaboran de manera activa en la implementación de un proceso de mejora continua para proteger y promover la salud, seguridad y bienestar de todos los trabajadores de una empresa, para de esa manera lograr la sostenibilidad en el centro laboral
También se debe destacar el trabajo de los estándares internacionales en seguridad como la ISO 45001, que buscan promover las políticas de una empresa saludable. No olvidar que los estandares internacionales buscan siempre mejorar el clima laboral de una empresa
¿Qué aspectos básicos se evalúa en una empresa?
Se debe considerar los aspectos relacionados con la salud y seguridad en el entorno físico del trabajo. Asimismo los temas relacionados con la salud, seguridad y bienestar en el entorno psicosocial de trabajo, incluyendo la organización del trabajo y la implementación de una cultura laboral. También debe considerarse la implementación de recursos humanos y logísticos para asegurar la salud personal en el lugar de trabajo, así como la participación activa en la comunidad para mejorar la salud de los trabajadores, sus familias y cualquier otro miembro de la comunidad.
¿Cuáles son los pilares fundamentales de una organización saludable?
Existe algunos aspectos neurálgicos que permiten que una organización sea saludable y son:
- Aspectos relacionados con la salud y la seguridad en el lugar de trabajo.
- Políticas de seguridad, bienestar y salud en el entorno psicosocial.
- Recursos consistentes para la salud personal en el trabajo.
- Participación activa de la empresa en actividades de la comunidad.
¿Cómo saber si una empresa es saludable?
Básicamente debemos considerar algunos aspectos de manejo, que nos indicaría que estamos frente a una empresa saludable. Los aspectos a evaluarse se caracterizan por:
✔ Enfocar su atención en el rendimiento en lugar de la productividad
Empresas saludables priorizan la eficiencia por encima de la productividad en sus metodologías de trabajo. Esto implica una habilidad para distinguir entre la productividad general y su capacidad para reflejar un rendimiento verdaderamente efectivo. Este enfoque evita desgastes a largo plazo que podrían quedar camuflados por éxitos inmediatos en términos de productividad.
✔ Priorizar la salud mental de sus trabajadores
Empresas saludables asumen la responsabilidad del bienestar psicológico de sus empleados, ya que comprenden cómo el trabajo puede tener un impacto positivo o negativo en la salud mental. Por tanto, se esfuerzan por promover el bienestar psicológico y aprovecharlo en beneficio de la empresa.
✔ Implementar estrategias efectivas para crear un ambiente laboral positivo
Empresas saludables desarrollan una estrategia sólida para fomentar un ambiente laboral positivo, basándose en decisiones concretas que reflejan su cultura corporativa. No dejan nada al azar o a la improvisación, sino que tienen una visión integral de las áreas clave que deben considerar para mejorar su eficiencia.
✔ Identificar y prevenir todo tipo de riesgos psicosociales
Empresas saludables se preocupan por identificar y prevenir los factores de riesgo psicosocial que podrían afectar la salud mental de sus empleados. Su enfoque es anticiparse a estos riesgos, ya que comprenden que la prevención, además de ser una obligación legal, resulta más rentable desde una perspectiva económica y beneficioso para el bienestar de los trabajadores que abordar los problemas una vez que han surgido.
✔ Fomentar la cooperación activa en el entorno laboral
Empresas saludables involucran a todos los miembros de su personal en la consecución de los objetivos corporativos, sin importar su posición jerárquica o el departamento en el que trabajen. Manteniendo canales de comunicación abiertos, estas empresas promueven un ambiente de trabajo colaborativo que fortalece la cohesión de los equipos. Además, se esfuerzan por capacitar a los responsables de recursos humanos para que adquieran las habilidades necesarias para cuidar de manera efectiva del capital humano bajo su supervisión.
¿Cuáles son los beneficios de ser una empresa saludable?
Invertir en iniciativas que promuevan la salud en las empresas tiene un impacto positivo en el bienestar, la reputación y la productividad de la empresa, sin incurrir en pérdidas significativas. Los beneficios de adoptar este enfoque son variados y notables:
Incremento sostenido de la productividad
Cuando los empleados se sienten valorados, su eficiencia y productividad aumentan, lo que a su vez contribuye a mejorar la salud financiera de la organización al incrementar las ganancias. Además, el crecimiento de los beneficios permite ofrecer salarios más competitivos.
Optimización de la calidad y reputación
Las culturas empresariales saludables motivan a los empleados a producir productos y servicios de alta calidad, lo que mejora la reputación de la empresa y atrae a talentos cualificados.
Retención de trabajadores
Las empresas saludables valoran a sus trabajadores, lo que mejora su moral y reduce la rotación laboral, disminuyendo los costos asociados con la contratación y capacitación de nuevos empleados.
¿Por que se debe seguir el modelo de empresa saludable?
Principalmente porque una empresa saludable tiene un impacto directo en la calidad de vida de todos los que forman parte de la organización, independientemente de su tamaño. Además, crea un entorno en el que los trabajadores se sienten motivados, lo que se traduce en un mejor rendimiento y una mayor capacidad para resolver problemas. Es fácil darse cuenta que empresas que descuidan una cultura saludable enfrentan problemas como empleados descontentos con su trabajo, con una alta rotación de personal, absentismo laboral. Todo ello traerá como consecuencia un ambiente de trabajo tóxico, con bajos niveles de retención de talento y una mala reputación ante la comunidad del entorno donde se desenvuelve la compañía. rev.
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